En Alaska existen dos gasoductos propuestos en marcha (apoyados por Alaska Gas y TransCanada) y en 2010 se prevé que, mediante una Open season, se clarifique el panorama inversor sobre esta gran infraestructura. En Alaska Gas participa BP.
En Canadá, Repsol YPF (75% del proyecto a través de su filial Repsol Energy Canada) puso en marcha la regasificadora Canaport LNG, desde la cual tiene previsto distribuir gas tanto en Canadá como en Estados Unidos. En un primer momento el grupo se ha propuesto inyectar 28 millones de m3 diarios al sistema de gasoductos norteamericano.
A primeros de noviembre se hizo público que Iberdrola ya podía llevar GNL al mercado de EE.UU., tras la entrada en vigor del acuerdo firmado con la petrolera Chevron, por el que dispone de acceso a una capacidad de regasificación anual de 1 bcm, en la planta de Sabina Pass, cercana a Houston. El acuerdo, que se cerró como resultado de una subasta, permite a Iberdrola descargar un buque metanero al mes en EE.UU.
Los países del Cono Sur están mirando al GNL para afrontar la demanda futura de gas natural. Las importaciones de GNL en América del Sur crecerán en los próximos años, una vez que se pongan en operación las terminales de Brasil, Argentina y Chile. Nuevas terminales en México se sumarían a este esquema.
Actualmente hay cinco terminales de descarga y regasificación operando en el Cono Sur (una en Argentina, regasificadora flotante, dos en Brasil, ambas flotantes, y dos en Méjico), más una en Puerto Rico. Habría que sumar tres en construcción: dos en Chile (Quintero y Mejillones), y otra en Méjico, Manzanillo. Dos más están sin decisión final de inversión: una en Méjico y otra en Uruguay.
En el lado de la exportación, hay una en construcción, en Perú, y dos planeadas más en Venezuela: Cigma LNG T1 y Mariscal Sucre LNG T2. Como es ya conocido, la apuesta en el pasado de Venezuela por este objetivo es una historia de frustraciones. Esperemos que ahora se de un impulso definitivo.
En Venezuela Repsol YPF confirmó a finales de octubre un gran descubrimiento offshore (a 3.147 metros) de gas en el bloque Perla IX, operado al 50% con ENI. Este hallazgo ha sido calificado como uno de los cinco mayores del mundo en 2009.
Venezuela y Trinidad & Tobago poseen riquezas gasitas compartidas, en concreto al menos tres grandes campos de gas corren a lo largo de su frontera marítima.
Trinidad & Tobago ha desechado construir un quinto tren de licuefacción, después de un estudio de viabilidad. Por ahora no se cuenta con suficiente gas para acometer esta inversión.
En México, la terminal de Manzanillo se sitúa en la costa del Pacífico y se espera que esté en operación en 2011.
En Argentina, el gobierno aprobó a mediados de año una subida del precio del gas en pozo, pero algunos analistas opinan que el nuevo precio todavía es insuficiente para afrontar exploraciones significativas.
Chile recibió su primer cargamento de GNL en la terminal de Quintero en julio de 2009. Esta planta puede cubrir el 40% de la demanda actual. En la segunda terminal (Mejillones) participa GDF Suez y podría entrar en operación comercial en la primavera de 2010. Entre otros objetivos, Chile busca romper su alianza gasista con Argentina, con algunos malos recuerdos como la interrupción de suministro en un invierno austral reciente.
Las dos terminales flotantes con las que cuenta Brasil entraron en servicio en 2009, localizadas en el norte y en Río de Janeiro. Una tercera terminal ha sido cancelada recientemente pero Petrobras insiste en plantear una tercera terminal en el sur para 2013. Con estas actuaciones, Brasil ha reducido su dependencia del gas boliviano.
Como se ha señalado, debido al éxito en la búsqueda de nuevos yacimientos offshore, en el mercado del gas natural, el rol de Brasil a medio plazo puede cambiar de importador a exportador.