Las cifras oficiales de avance señalan un consumo total de energía primaria en España de 130,5 millones de toneladas equivalentes de petróleo (Tep).
Si no se considera la energía no comercializada (por ejemplo, el consumo de biomasa en los hogares), el consumo de energía primaria se ceñiría a 125,9 millones de Tep.
Como consecuencia de esta situación ha seguido aumentado la eficiencia energética, tendencia que se inició en 2005.
La evolución del consumo específico de cada una de las energías primarias ha sido la siguiente:
Disminuye la demanda de carbón (-24,1%), gas natural (-10,5%), nuclear (-10,5%) y petróleo (-5,7%) y aumentan la producción de energías renovables (+11%) y por tanto su consumo.
La demanda de carbón lleva una cuva descendente desde inicios del 2008. En ese año hubo un aumento de precios a la par que el precio del crudo; en el 2009 se han visto afectados por la disminución del huevo térmico para la generación de electricidad. Dicha disminución ha sido debida al aumento de la participación de las energías renovables en el mix de generación.
A pesar de que la producción de carbón de origen español está en retroceso desde hace más de 20 años (en 1983 con cerca de 40 millones de toneladas alcanzó el máximo de la historia reciente), con valores en los últimos años de unos 10 millones de toneladas, los desajustes temporales en el precio respecto al carbón de importación y/o al gas natural, han producido un excedente de producción.
La estrechez del hueco térmico se agudiza con la disminución de la demanda. Por ejemplo, en noviembre la producción de electricidad de origen eólico aumentó un 38% sobre el mes anterior, mientras que la demanda de electricidad retrocedió un 6,2%, con temperaturas bastante más suaves que en 2008.
La disminución del hueco térmico también ha afectado al gas natural. En 2008 su uso en generación representó el 41,8% de la demanda total de gas natural, descendiendo al 40,1% en 2009. Esta disminución también se ha visto afectada por el buen comportamiento de las energías renovables. En el 2009 ha habido un aumento importante de la energía eólica y de la producción hidroeléctrica.
En los tres primeros meses de 2009, la producción hidroeléctrica aumentó un 124%, representando el equivalente al 50% de la producción de electricidad en los ciclos combinados de gas natural en ese mismo período. Sin embargo, ha sido un año con una producción hidroeléctrica constante debido a la masa de aguas acumulada y a las lluvias de los primeros meses (en abril las reservas acumuladas de agua eran del 54,4%) y las de diciembre, con un aumento acumulado total del 11,5%.
El último día de 2009 las reservas de agua se situaban en el 50% de la capacidad, cinco puntos más que a finales del 2008. En paralelo, el verano del año 2009 ha sido el tercero más caluroso desde 1970.
El petróleo se sigue moviendo alrededor del 50% de cuota de energía primaria, el carbón (sin residuos sólidos urbanos) ha descendido casi dos puntos en cuota de mercado, quedando su aportación a la energía primaria en el 7,9%. Hace dos años estaba en el 13,9%.
Dentro de los productos petrolíferos, los datos provisionales de CORES aportan un descenso del 5,3% en la demanda de gasóleos. Con datos firmes acumulados a noviembre, CORES concreta en un 9,3% la caída de la demanda en querosenos y del 6,1% en GLP. Son datos impactantes, especialmente en gasoil (teniendo en cuenta la cuota creciente de estos vehículos dentro del parque de automóviles español) y querosenos, consecuencia del descenso de los vuelos aéreos.
El aumento de 2.459 MW eólicos instalados en 2009 es de los más altos de los últimos años. No obstante, la previsión para 2010 es de poner en operación 1.000 MW, la cifra más baja desde el año 2000.
A finales de 2009 había 860 MW termosolares instalados, también por encima de las previsiones del Plan de Energías Renovables 2005-2010.
En energía fotovoltaica España se ha posicionado entre los primeros puestos del mundo por potencia instalada, especialmente por el esfuerzo realizado en 2008. En ese ejercicio se instalaron 2.660 MW. La demanda para crear nuevas instalaciones superó en 2008 a las previsiones del gobierno. Como resultado el gobierno recortó su política de ayudas, aprobando el Real Decreto 1578/2008, lo que ha supuesto la paralización del mercado durante más de seis meses. Actualmente hay instalados más de 3.500 MW.
En 2009 las dificultades de financiación, la rebaja de las primas en octubre de 2008 y la bajada continua de los precios de los paneles solares (que ocasiona dilaciones en la decisiones de inversión por parte de los inversores), son factores que han ocasionada una caída fuerte de las inversiones, instalándose en 2009 solamente alrededor de 120 MW. Los planes actuales del gobierno se concretan en adjudicar la instalación de 500 MW por año.
En diciembre 2009, había 338 instalaciones inscritas en el MITyC, lo cual supone una potencia inscrita de 6.389 MW de tecnología eólica y de 2.340 MW de tecnología solar termoeléctrica. Con ello se superan los objetivos del Plan de Energías Renovables 2005-2010. La inscripción en el registro de preasignación de retribución es una condición indispensable para que las instalaciones puedan cobrar ayudas públicas.
España continúa siendo el tercer productor de energía eólica del mundo, en el camino de conseguir el objetivo de llegar a los 20.155 MW instalados en 2010, marcados en el Plan de Energías Renovables del gobierno español.
Como novedad aportan la capacidad de anticipar las posibles incidencias por pérdidas súbitas de generación eólica como consecuencia del efecto que sobre ésta presentan los huecos de tensión. Otras acciones en ese sentido son aumentar la capacidad de evacuación del sistema eléctrico hacia países vecinos o aumentar la capacidad de bombeo.
En enero de 2009 se superaron por primera vez los 11.000 MWh de generación eólica instantánea; a primeros de marzo se superaron los 11.200 MWh, llegando a cubrir cerca del 30% de la demanda eléctrica peninsular a las 11 horas. El 8 de noviembre de 2009 se alcanzaron los 11.620 MW de generación instantánea.
Por parte de responsables del Ministerio de Industria, Turismo y Comercio (MITyC) se ha anunciado el objetivo de instalar hasta 5.000 MW de potencia eólica offshore en el horizonte de 2030.
El 24 de julio el MITyC publicó el Atlas Eólico de España, lo que permitirá a los agentes del sector, y al público en general, la evaluación inicial del potencial eólico disponible en todo el territorio nacional y en el litoral marítimo.
A mediados de mayo se inauguró en Puertollano (Ciudad Real), la primera central comercial de Europa de energía solar termoeléctrica de colectores de cilindros parabólicos y sin acumulación. En esta central participa Iberdrola Renovables y el MITyC a través del IDAE. Su potencia es de 50 MW.
España es la primera potencia europea de tecnología termoeléctrica, con el objetivo de llegar a 730 MW instalados a finales de 2010, con lo que se superarán los objetivos propuestos en el Plan de Energías Renovables 2005/2010.
Medidas liberalizadoras del mercado, el desarrollo de infraestructuras e interconexiones eléctricas y de gas, el apoyo a las renovables y el ahorro y la eficiencia energética en todos los sectores de consumo, están entre los instrumentos que se están desarrollando para cumplir los objetivos.
Dentro de la mejora de las infraestructuras se incluyen la construcción y potenciación del anillo mediterráneo de gas y electricidad, así como la promoción de los corredores energéticos situados en la parte suroccidental de Europa (conexiones España-Francia).
La propuesta de Modelo de organización y principios de funcionamiento del mercado ibérico del gas (MIBGAS) elaborada por los reguladores portugueses (ERSE) y español (CNE) en 2008, proponía un plan de acción en el que se contemplaba la realización de un estudio comparativo de las condiciones para la obtención de la licencia de comercialización en ambos países y una propuesta de armonización. Se ha elaborado un documento de consulta, con la propuesta de mutuo reconocimiento de las licencias de comercialización de gas de ambos países, propuesta que se ha elevado a ambos gobiernos.
En el entorno energético ha habido puntos de cierta controversia. La mayoría de los agentes públicos y privados de los sectores eléctricos y gasistas han señalado el error que supondría frenar las inversiones en infraestructuras. También ha estado presente en el pasado ejercicio la polémica acerca de la energía nuclear. La decisión del gobierno de dar una prórroga parcial sólo hasta el 2013 a la central de Garoña, ha creado polémica entre defensores de dicha energía y oponentes