La digitalización es parte del futuro del sector español del gas. Un proceso que se inició hace ya unos cuantos años por parte de las principales compañías gasistas, y que va mucho más allá del cambio cultural que supone una atención más inmediata, profesional y personalizada al cliente. Y es que la transformación digital puede contribuir decisivamente en la lucha contra el cambio climático y a la consecución de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS). Y más aún: establecer un nuevo modelo productivo que sea capaz de fomentar el empleo y la recuperación económica en el escenario de la postpandemia.

Por Juan Carlos Giménez

Genéricamente, podemos definir el proceso de digitalización como una transformación profunda de las organizaciones en su forma de hacer y gestionar las cosas, que abarca todos los procesos y modelos de negocio, e incluye el desarrollo de nuevas competencias. Este proceso se basa en la utilización y aprovechamiento al máximo de las tecnologías digitales.

Hablamos de un proceso que implica un cambio cultural, organizacional y operativo en el seno de las organizaciones. Y que tiene impacto en las políticas públicas —infraestructuras, movilidad, reforma de la administración, agenda urbana y rural, ciencia e innovación, etc.—, pero también en la modernización del tejido industrial, desde las grandes compañías a las pymes de todos los sectores.

Los beneficios más significativos derivados de un plan de transformación digital incluyen mejoras en áreas muy diversas: optimización de costes y recursos, agregación de valor a cada interacción con el cliente, mejora del flujo de documentos y limitación de procesos en papel, incremento de la velocidad de las operaciones minimizando errores y procesos, agilización del trabajo de empleados, proveedores, colaboradores y clientes… También propicia la reorganización de equipos de trabajo y la evaluación de su efectividad, la identificación de oportunidades de mejora en los procesos, o la toma de decisiones basadas en datos de alta fiabilidad.

La digitalización es sin duda una pieza importante del Plan de Recuperación para Europa tras la crisis de la COVID-19. De hecho, está basado sobre dos grandes principios: la inversión verde y la transformación digital, a los que se dedicará la mayor parte de la dotación económica del plan.

Plan de Recuperación español y la energía

Por su parte, el Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia España Puede se articula en cuatro grandes ejes transversales: transición ecológica, transformación digital, igualdad de género y cohesión social y territorial, que a su vez se materializan en 10 políticas palanca, una de las cuales es la modernización y digitalización del ecosistema de nuestras empresas.

Algunas de las iniciativas de interés para las empresas de diferentes sectores, alineadas con las políticas de inversión prioritarias para Bruselas, se concretan en la mejora de la interconexión de las cadenas de valor, el tratamiento avanzado de datos, las soluciones de inteligencia artificial, los proyectos de simulación industrial, de realidad aumentada, robótica colaborativa o cognitiva...

En el sector de la energía, son de especial interés las soluciones de ahorro y eficiencia energética, así como los proyectos relacionados con las redes de transporte y distribución, ya se trate de lograr mayor interconexión internacional o de facilitar la integración de energías renovables o de vehículos eléctricos.

Según la consultoría energética Wood Mackenzie una mayor digitalización en los procesos de las empresas europeas de petróleo y gas en fase de producción podría suponer un ahorro de hasta 73.000 millones de dólares al año. Y todo gracias a medidas como el análisis avanzado de datos, el mantenimiento preventivo de instalaciones o una mayor interconexión entre compradores y proveedores.

Si nos centramos en el sector gasista, el proceso de digitalización tiene aplicaciones tanto en la operación de infraestructuras (sistemas digitales de última generación, sensorización y gestión en tiempo real de indicadores, operación remota, identificación de fugas…) como en la gestión en tiempo real de la energía que entra y sale de las redes de distribución, o las comunicaciones (información a la clientela, tramitación digital de certificados, …).

Potencialidades

La digitalización tiene también la potencialidad de promover el desarrollo económico mediante el llamado “trabajo verde”. Y el ejemplo más evidente sería el proceso de renovación de los contadores de gas tradicionales. En España, el recambio de estos mecanismos se estima en torno a siete millones de unidades. Y su fabricación, instalación y gestión podría generar hasta 50.000 nuevos puestos de trabajo.

Finalmente, la digitalización puede contribuir de manera sustancial y sostenida al descenso de las emisiones de gases de efecto invernadero. Diferentes estudios han apuntado a que la aplicación de innovaciones tecnológicas es capaz de disminuir las emisiones de CO₂ en un 20% para 2030, o que las comunicaciones móviles pueden ahorrar cada año más de 180 millones de toneladas de este mismo gas. El Libro Blanco de la Inteligencia Artificial y la Estrategia Europea de Datos de la Comisión Europea traza una hoja de ruta para que la digitalización apoye la transformación ecológica a través del ahorro de combustible, el fomento de contadores inteligentes, el reciclaje y aprovechamiento de residuos y equipos, la reducción de los consumos de energía, un menor uso del papel y una mayor eficiencia energética.

En este contexto, Sedigas ha establecido una serie de estrategias y acciones para contribuir al desarrollo económico utilizando la innovación y la digitalización como pilares fundamentales, sin olvidar que dicha recuperación pasa por reforzar la transición ecológica.

Sedigas se propone fomentar la digitalización en el consumo y suministro de gas para ganar en eficiencia y seguridad, lo que supondría el desarrollo de nuevos sistemas y, por lo tanto, la creación de miles de nuevos empleos.

El sector gasista español lleva años trabajando en I+D+i para aportar alternativas cada vez más responsables y ecológicas, y una de las prioridades ha sido la digitalización: la construcción y operación de las infraestructuras, la gestión de la energía, la comunicación de las empresas con sus proveedores, clientes y otras entidades, son áreas afectadas positivamente por la gestión digital del sistema gasista.

Transformación digital como palanca estratégica

Enagás considera la transformación digital una palanca estratégica clave en un doble sentido: por un lado, para que la compañía siga operando con excelencia sus infraestructuras energéticas; y por otro, para mejorar la gestión y el mantenimiento de sus activos. Siguiendo esta premisa, se están impulsando una serie de proyectos que, a partir de la monitorización del funcionamiento de dichos activos, permitirán evolucionar hacia un mantenimiento proactivo y predictivo. Y el resultado será una mejora en la operativa, optimización de los planes de mantenimiento, aumento de la vida útil de los activos y capacidad de anticipación ante la eventualidad de fallos en equipos críticos.

Enagás está desarrollando proyectos basados en plataformas que centralizan los datos más relevantes para la gestión de las infraestructuras de manera integrada y que permitirán nuevas capacidades de explotación, visualización y analítica. Estas plataformas demuestran su utilidad en aspectos como la mejora en la calidad y gobierno de los datos de las infraestructuras, mayor facilidad del acceso para su explotación; impulso de una cultura data driven para la toma de decisiones en la operación y mantenimiento de los activos; o la generación de valor a partir del know-how de la compañía.

El desarrollo de estos proyectos está impulsado por la mejora de la conectividad, que permite captar datos en tiempo real; la incorporación de nuevos algoritmos de análisis con Inteligencia Artificial y Machine Learning, que permiten extraer nuevas conclusiones de los activos; y una mayor capacidad de procesamiento y almacenamiento disponible en arquitecturas en la nube.

Dos de los proyectos más destacados que se están desarrollando en Enagás son las plataformas PLATIOM y Neptuno. La primera permite el análisis de los datos de operación y mantenimiento de las plantas de GNL. Las soluciones que comienzan a implementarse en esta plataforma están orientadas al conocimiento de la salud de los activos y optimizar así su mantenimiento, así como a detectar anticipadamente posibles fallos en los equipos críticos mediante Machine Learning.

Por su parte, la Plataforma Neptuno ayudará a la optimización y mejora de los procesos de medición de gas en los puntos de entrega de la red de Transporte de Enagás, a través de un sistema de adquisición de datos y un software de Inteligencia Artificial. Esta herramienta monitoriza la medida de los instrumentos, gestiona las alarmas, alertas e indicadores en tiempo real, comprobando la fiabilidad de la medida en todo momento.

2.250 millones de euros para contadores inteligentes para el agua y el gas

Naturgy se ha unido a otras 11 grandes compañías (Canal de Isabel II, Aqualia, Suez, Global Omnium, Emasesa, Telefónica, Vodafone, Orange, Indra, Contazara e Hidroconta) en un proyecto para la digitalización de los contadores de los servicios de agua y gas en los hogares españoles. El plan contempla la instalación de 13,5 millones de contadores inteligentes para el agua y de ocho millones para el gas hasta 2025, con una inversión conjunta inicial de 2.250 millones de euros.

Las empresas, que están abiertas a la incorporación de más socios, ya han trasladado al Gobierno la propuesta para que se incluya dentro de los proyectos financiados por los fondos europeos para la recuperación. La inversión total estimada se divide en 1.350 millones de euros para el sector del agua y 900 millones para el del gas. Las empresas plantean asumir entre el 70% y el 80% del coste, y el resto sería financiado por los fondos Next Generation. La propuesta garantiza el mantenimiento de las tarifas actuales.

Los sectores del agua y el gas han aunado fuerzas para promover un proyecto que consideran de "desarrollo industrial" y al que han sumado al resto de actores implicados en la digitalización de los contadores. Así, por el momento, forman parte de esta iniciativa las principales empresas públicas y privadas de servicios de agua en España, la mayor gasista (Naturgy), operadores de telecomunicaciones que se encargarán de la gestión de los datos y fabricantes de contadores.

El objetivo del proyecto es desarrollar al máximo el sector de la telelectura de contadores basada en el Internet de las Cosas (IoT) y poner las bases para que España sea líder internacional, tanto en el parque instalado de contadores inteligentes como en la industria asociada a su desarrollo y explotación, modernizando la comunicación entre los hogares y las empresas de servicios estratégicos.

Las empresas sostienen que el proyecto se enmarca "claramente" dentro de los parámetros de la trasformación digital y la transición ecológica del Plan de Recuperación de la Unión Europea, al implicarse los cuatro ejes transversales planteados: transformación digital, transición ecológica, cohesión social e igualdad.

Entre los beneficios de la telelectura figuran la mejora de la eficiencia en la gestión de las redes de abastecimiento, el aumento de la garantía de suministro, la detección temprana de fugas, el soporte en incidencias en la red de distribución, la reducción de fraudes, la disminución de errores manuales en la lecturas y reclamaciones, la mayor y mejor información a los clientes, o la posibilidad de nuevos servicios y un mayor valor añadido al empleo.

En el caso de Naturgy, la apuesta por la digitalización de sus contadores no es nueva: su filial de distribución eléctrica UFD (Unión Fenosa Distribución) dispone desde 2019 de contadores inteligentes instalados para la práctica totalidad de equipos con potencia contratada inferior a 15 kilovatios, lo que supone cerca de cuatro millones de usuarios. Para materializar la telegestión de estos equipos, la compañía ha invertido 86 millones de euros en adaptar más de 36.500 centros de transformación -el 96% del total.

La realidad virtual crea una planta de gas

Redexis, compañía integral de infraestructuras energéticas, ha participado junto al clúster AEICE y la compañía 1A Ingenieros en el desarrollo SIMUAL, un proyecto de realidad virtual basado en Building Information Modeling (modelado de información para la edificación, BIM por sus siglas en inglés) y en herramientas digitales, una solución innovadora para la simulación de instalaciones industriales de producción y distribución energética.

La simulación recrea la planta de gas natural licuado (GNL) de Redexis situada en Sotillo de la Adrada (Ávila), generando un modelo de realidad virtual capaz de recrear operaciones para formar y adiestrar, en un entorno preventivo y sin riesgos, al personal especializado en labores de mantenimiento, seguridad de la instalación y prevención de riesgos.

Para la creación de este modelo, se ha utilizado tecnología BIM para el desarrollo y digitalización de los proyectos en la fase de diseño, construcción, operación y mantenimiento de la instalación, prosiguiendo con el empleo de otros programas para la creación de un entorno de realidad virtual realista e interactivo. Para la digitalización de la instalación, se han utilizado además otras herramientas como el escáner láser y drones en la generación de nubes de puntos.

Este sistema de construcción virtual facilita la formación anticipada del personal en el uso y el mantenimiento de la instalación sin necesidad de desplazamientos y de un modo lúdico, mejora la atención y la toma de decisiones por la práctica continuada.  Además, también resulta útil para la selección previa del personal y la certificación de su capacitación técnica.

El proyecto forma parte de la iniciativa “Industria Conectada 4.0” del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo para el apoyo a Agrupaciones Empresariales Innovadoras, con objeto de mejorar la competitividad de las pequeñas y medianas empresas.

Redes inteligentes y monitorización remota

Nortegas, segunda distribuidora de gas natural en España, ha puesto en marcha dos iniciativas pioneras en el campo de la digitalización. En enero lanzó el proyecto DINEGAS, cuyo objetivo es dar respuesta al doble reto de la reducción del coste de los equipos de medida de la calidad del gas y de la necesidad de medir la red a distancia y en tiempo real. Y en marzo culminó, en colaboración con el Ente Vasco de la Energía (EVE), la puesta en marcha de la primera red europea de contadores de gas natural inteligentes en una localidad vizcaína.

El proyecto DINEGAS, con financiación del programa Hazitek del Gobierno Vasco y colaboración del CEIT, forma parte de la iniciativa de Nortegas por impulsar la inyección de biometano de origen renovable en la red de distribución, lo que permitiría extender su uso y contribuir a la descarbonización.

Para llevar a cabo la monitorización y gestión de datos de las redes de suministro de forma remota, Nortegas se ha aliado con IoT Water Analytics, que emplea la Internet de las Cosas para desarrollar un dispositivo que mide el poder calorífico superior (PCS) del gas natural, con un coste inferior a los actualmente disponibles en el mercado.

En cuanto al proyecto de redes inteligentes, Nortegas lo ha puesto en marcha en la localidad de Ugao-Miraballes, y ha supuesto la entrada en funcionamiento de cerca de mil contadores inteligentes, para clientes tanto residenciales como comerciales de este municipio vizcaíno. La red inteligente de gas supone un gran avance desde el punto de vista de la seguridad, ya que permite alertar y actuar de manera inmediata en caso de producirse cualquier situación de emergencia, como una fuga o una mala combustión en una caldera.

La red está dotada de elementos electrónicos y de telecomunicaciones idóneos para proporcionar información esencial, tanto a la compañía distribuidora como a los clientes de gas natural, para garantizar una gestión más eficiente y segura del consumo e inducir a una mejora en la calidad del suministro y en el servicio.

Consta de tres elementos esenciales: 974 contadores inteligentes en domicilios y pequeños negocios, instalados gratuitamente; sensores de metano y de monóxido de carbono, que detectan fugas de gas o malas combustiones en las calderas; y una aplicación móvil que todos los usuarios de la localidad pueden descargar. Desde la aplicación disponen de un canal de comunicación bidireccional con Nortegas, que incluye un seguimiento constante de sus consumos, información de cualquier incidencia en su instalación o en la red, así como consejos e información útil.

Ugao-Miravalles se ha convertido de esta forma en el primer municipio europeo dotado de contadores de gas natural inteligentes.