Los gases renovables constituyen una alternativa tecnológica viable para reducir de manera rápida y eficiente las emisiones de gases de efecto invernadero. Y, en este sentido, es imprescindible contemplar, en el caso español, al sector industrial, puesto que éste representa alrededor del 25% de dichas emisiones. Naturgy organizó en julio una jornada de reflexión en torno a esta cuestión, que congregó entre otros al ministro del ramo y al presidente de la CEOE. Y que deparó interesantes conclusiones, además de poner de relieve que algunas empresas de referencia ya han apostado por integrar el biometano en sus procesos productivos.

Por Juan Carlos Giménez

Expertos, asociaciones industriales y empresas acudieron el pasado 10 de julio a un encuentro bajo el título "Retos y oportunidades de la descarbonización en la industria", organizado por Naturgy en el centro CaixaForum de Madrid. El ministro de Industria, Jordi Hereu, fue el encargado de abrir la jornada, junto al presidente de CEOE, Antonio Garamendi, y al presidente ejecutivo de Naturgy, Francisco Reynés.

Hubo consenso en que la descarbonización industrial es clave para alcanzar los objetivos de reducción de emisiones en España. Al mismo tiempo, buena parte de las intervenciones tuvieron como denominador común la reivindicación de la “neutralidad tecnológica”, partiendo del análisis de todas las alternativas económicamente viables y con suficiente grado de madurez. Y, en consecuencia, sin renunciar de antemano a ninguna alternativa disponible en materia de tecnología.

En este sentido, el presidente ejecutivo de Naturgy, Francisco Reynés, defendió la necesidad de apostar por esa neutralidad tecnológica en la búsqueda de soluciones que permitan avanzar en la transición energética, y reivindicó el equilibrio entre sostenibilidad, seguridad de suministro y competitividad. “El fortalecimiento del tejido industrial nacional y europeo requiere una regulación en la que la descarbonización y la competitividad industrial sean objetivos complementarios, y los gases renovables pueden jugar un papel esencial para lograr este equilibrio”, destacó.

También hubo coincidencia a la hora de abordar el proceso de descarbonización apostando por fórmulas que no resten competitividad al sector industrial en sus variados procesos productivos. Aprovechando al mismo tiempo las oportunidades que abre el nuevo escenario energético.

OBJETIVOS COMPLEMENTARIOS

El presidente de CEOE, Antonio Garamendi, destacó que la competitividad y la transición energética deben ser objetivos complementarios. Garamendi defendió que España debe aprovechar la transición energética y la descarbonización de la economía “para fortalecer nuestra industria y nuestro tejido productivo”. Pero recordó que esa transición requiere “unas inversiones gigantescas”, de cerca de 300.000 millones de euros hasta 2030, según el Plan Nacional Integrado de Energía y Clima (PNIEC). Y que dicha inversión corresponderá “en un 80% a las empresas, al sector privado”.

Por su parte, el ministro de Industria y Turismo, Jordi Hereu, anunció la convocatoria del mecanismo de compensación por los costes de las emisiones indirectas de gases de efecto invernadero, con un presupuesto de 300 millones de euros. A la vez que celebró el reciente acuerdo firmado entre Naturgy y el grupo papelero Lecta para el suministro de biometano. “Sólo sumando esfuerzos entre todos y de manera conjunta podremos sacar adelante la transición en la que estamos inmersos. Un proceso que requiere un gran volumen de innovación e inversión empresarial”, señaló.

El biometano es un gas obtenido a partir del tratamiento de residuos orgánicos, que reúne características similares a las del gas natural convencional y que puede distribuirse a través de la misma red de gasoductos, lo que lo hace idóneo para atender las necesidades energéticas de la industria y los hogares. Este gas renovable contribuye además a la creación de empleo de calidad y la competitividad, la revitalización de zonas rurales en riesgo de despoblación, la reducción de emisiones y el fomento de la economía circular. Es una alternativa energética a los combustibles fósiles cada vez más demandada que, según un estudio elaborado por Sedigas y PwC, cuenta en España con potencial para producir 163 TWh, equivalente al 50% de la demanda de gas natural del país.

Los empresarios industriales asistentes a la jornada organizada por Naturgy trasladaron su compromiso con el proceso de descarbonización, pero reclamando al mismo tiempo un marco regulatorio claro que incentive el consumo y la producción de gas renovable. Sólo así España logrará aprovechar el enorme potencial que tiene en la producción de biometano. “Son necesarios ajustes estructurales, un marco normativo y fiscal, y una política industrial que incentiven a las empresas a invertir en estos procesos de bajas emisiones”, señaló durante la clausura del evento María Higueras, directora de Mercado Industrial de Naturgy.

REPRESENTACIÓN DE LA INDUSTRIA

La jornada contó con la participación de grandes corporaciones industriales como Gestamp, Lecta, Porcelanosa o Sidenor, así como con representantes de asociaciones industriales o empresariales como Acogen, Cepyme, GasINDUSTRIAL o la Alianza por la Competitividad de la Industria Española. Los representantes de la industria insistieron en su reivindicación de la neutralidad tecnológica, y defendieron un “menú de soluciones sin apriorismos ideológicos” para que cada empresa decida, en función de su situación individual, cómo afrontar este proceso de transformación hacia la neutralidad climática.

El evento también incluyó la participación de diversos expertos. Así, el catedrático emérito de la Universidad de Barcelona, Mariano Marzo, defendió que “la política energética es mucho más que descarbonizar, y hoy día, es prioritario garantizar la seguridad de suministro, con inversión en aquellas energías primarias que vamos a seguir necesitando en los próximos años”.

En la jornada también estuvieron presentes los autores del estudio ‘Un sistema gasista Net- Zero: Una pieza clave en un modelo energético descarbonizado a 2050’, elaborado por Deloitte y la Fundación Naturgy. Este informe defiende también la neutralidad tecnológica, al concluir que “alcanzar la neutralidad de emisiones requiere considerar todas las soluciones disponibles de cero emisiones netas de forma que se pueda alcanzar el objetivo de la manera más eficiente posible”.

Al mismo tiempo, el estudio reivindica la consideración de los gases renovables como “una pieza imprescindible para lograr un sistema energético de cero emisiones netas que cubra, de forma eficiente, las necesidades de los consumidores manteniendo la seguridad de suministro”. Como consecuencia, el sistema gasista se presenta como “una pieza necesaria para el cumplimiento del objetivo de alcanzar un sistema neutro en emisiones para el año 2050 técnicamente viable, resiliente y eficiente”, concluye el trabajo de investigación elaborado por Deloitte y la Fundación Naturgy.

LÍDERES EN SECTORES COMO EL TEXTIL O EL PAPELERO APUESTAN POR EL BIOMETANO

La integración del biometano como fuente de suministro energético para la industria está aún en fase incipiente, pero cuenta ya con algunos ejemplos destacables, especialmente por la relevancia de las compañías que se han decidido a dar este paso.

En este sentido, es especialmente notorio el caso de Inditex, la multinacional española de fabricación y distribución textil con sede en Galicia. En enero de este año se anunció un acuerdo de la compañía fundada por Amancio Ortega con Naturgy y con el Ayuntamiento de La Coruña, por el que Inditex recibirá la totalidad del gas renovable producido en las instalaciones de la estación depuradora de aguas residuales de Bens, ubicada en la capital coruñesa.

Se trata de 5,1 GWh de biometano, obtenido a partir del tratamiento de 130.000 m3 de aguas residuales procedentes de los hogares y la industria del área metropolitana de la ciudad gallega. Esta cantidad cubrirá el 75% del consumo de gas natural de las instalaciones de Inditex en Arteixo y Laracha. El gas estará certificado mediante el esquema internacional de sostenibilidad International Sustainability and Carbon Certification (ISCC), y permitirá a la firma textil seguir avanzando en la reducción de sus emisiones de carbono y en la utilización de fuentes de energía con un menor impacto ambiental.

La EDAR de Bens se encargará de la producción del biometano, mientras que Naturgy llevará a cabo la limpieza y purificación del gas y su entrega a Inditex a través de su red de distribución de gas. Los beneficios de esta alianza entre el Ayuntamiento coruñés, la compañía gasista y la firma textil se reinvertirán además en proyectos de I+D+i vinculados con los gases renovables y la economía circular en las instalaciones de la EDAR de Bens.

La alcaldesa de A Coruña, Inés Rey, destacó en la presentación del acuerdo que el ayuntamiento ha trabajado durante años para obtener energías limpias mediante la gestión de residuos. Además, señaló que este convenio tripartito “abre un camino que espero sirva como ejemplo para aprovechar todas las posibilidades de esta nueva tecnología”. Por su parte, el director de Sostenibilidad de Inditex, Javier Losada, señaló que “la innovación y la colaboración son esenciales en el impulso de fuentes de energía alternativas”, y que “este proyecto pone de manifiesto como los nuevos desarrollos tecnológicos nos permiten aprovechar los residuos y convertirlos en nuevos recursos, avanzando hacia una economía circular”.

Por parte de Naturgy, su directora de Ventas al Mercado Industrial, María Higueras, valoró el acuerdo como “un importante hito que ilustra el potencial del biometano como vector energético estratégico para impulsar la descarbonización industrial de manera eficiente”. Por último, Jesús Chapado, director de Innovación de Naturgy, apuntó que “para abordar la transición ecológica tenemos que ser capaces de transformar la cadena de valor de la energía e impulsar la economía circular”, y que a través de este acuerdo “conseguimos potenciar la innovación para dar una segunda vida a los residuos en el proceso de descarbonización”.

GRUPO LECTA

Adicionalmente, en julio de este mismo año, Naturgy anunció la firma de un acuerdo con la multinacional Lecta para el suministro de gas renovable. Este facilitará, la descarbonización eficiente de la actividad de este grupo industrial líder en la fabricación y distribución de papeles especiales para etiquetas y embalaje y otros productos innovadores de alto valor añadido. Fruto de este acuerdo, los centros de producción de Lecta ubicados en Leitza (Navarra) y Zaragoza utilizarán biometano como fuente de suministro energético.

El gas renovable suministrado por Naturgy cuenta con las garantías de origen y pruebas de sostenibilidad certificadas para que el grupo papelero pueda compensar las emisiones derivadas de su actividad y cumplir con sus compromisos en materia de sostenibilidad. La firma de este convenio se enmarca en la senda de descarbonización acometida por el grupo Lecta para reforzar la sostenibilidad y la competitividad de sus unidades productivas en España.

El acuerdo supone un importante hito, al ser la primera gran compañía del sector papelero, dentro de la cartera de clientes de Naturgy, que utilizará biometano en sus procesos productivos. El volumen de suministro firmado entre las partes equivale al consumo anual de más de 800 hogares, y evitará la emisión de 740 toneladas equivalentes de dióxido de carbono, un volumen similar al generado en un año por medio millar de automóviles.

MÁS DE 50 PROYECTOS EN DESARROLLO

Naturgy aspira a ser la empresa líder en el impulso de los gases renovables en España, tanto en la producción y distribución de biometano como en el desarrollo del hidrógeno verde como vector energético, que tendrá un impacto significativo en el mix energético a medio plazo. La compañía gestiona ya más de 50 proyectos de biometano en distintas fases de desarrollo, y cuenta con dos plantas de producción propias en operación: una situada en la EDAR de Bens (A Coruña) y otra ubicada en Cerdanyola del Vallès (Barcelona).

A estas se sumará en los próximos meses una tercera que se encuentra actualmente en la fase final de construcción, ubicada en la explotación ganadera de Porgaporcs de Vila-Sana (Lleida), y tres más que están en desarrollo en Torrefarrera (Lleida), Utiel (Valencia) y Utrera (Sevilla). Además, Naturgy firmó recientemente un acuerdo para la adquisición de toda la producción de biometano del proyecto de Bioenergía Vallés Oriental (BioVO), ubicado en el municipio barcelonés de Granollers, así como la producción íntegra del primer proyecto de BioGNL en España para impulsar la descarbonización del transporte.

HIDRÓGENO RENOVABLE PARA LA ACTIVIDAD FABRIL

El pasado 18 de septiembre, la Fundación Naturgy presentó el informe “El impacto del pacto verde en la industria de la UE: medidas adoptadas y retos futuros”, elaborado por el profesor de la Florence School of Regulation Christopher Jones. El trabajo examina las regulaciones y normativas más destacadas y las nuevas políticas que se han adoptado en Europa en los últimos cuatro años, así como su efecto potencial en la industria del viejo continente.

El informe pone el foco no solo en la necesidad de que las empresas cumplan con nuevas obligaciones legales, sino en el hecho de que las medidas adoptadas “tendrán efectos fundamentales para el marco competitivo”, lo que redundará inevitablemente en que “habrá ganadores y perdedores”. Y en este contexto es interesante destacar las referencias al uso, en un próximo futuro, del hidrógeno renovable en el sector industrial. Así, por ejemplo, se destaca el hecho de que la nueva Directiva europea de Energías Renovables impone a todos los estados miembros la obligación jurídicamente vinculante de garantizar que, para 2030, el 42 % de todo el hidrógeno que consume su industria sea de naturaleza renovable, con un objetivo del 60 % para 2035. Lo cual requerirá una inversión masiva, de miles de millones de euros, para la producción, importación y para una nueva red de transporte de hidrógeno renovable en la UE.

EL INFORME DRAGHI

“El futuro de la competitividad europea”, conocido como “Informe Draghi”, es un análisis que solicitó la Comisión Europea al que fuera presidente del Banco Central Europeo entre 2011 y 2019. Presentado en septiembre de 2024, el documento analiza el estado de la economía europea y formula propuestas sobre cómo reactivarla, a la vez que identifica los desafíos a los que se enfrentan la industria y las empresas del viejo continente.

En el apartado dedicado a propuestas en el ámbito del gas natural, la número 7 hace referencia a una descarbonización progresiva, que permita a la industria pasar a utilizar el hidrógeno y los gases renovables “siempre y cuando el cambio resulte rentable”. Se trata de una propuesta cuya implementación se prevé en el largo plazo.

En concreto, el informe defiende que “el biometano o el hidrógeno limpio pueden ofrecer opciones descarbonizadas para reemplazar los combustibles fósiles”, ya sea como materia prima o como medio para obtener calor de alta temperatura. No se espera, sin embargo, su producción e implementación masiva para la industria a corto plazo, por lo que el informe aboga por el necesario “apoyo político para permitir que los compradores industriales proporcionen niveles mínimos de hidrógeno y tomar las decisiones de inversión necesarias para descarbonizar sus procesos industriales durante esta década”.

Asimismo, la propuesta de Draghi estima fundamental “el desarrollo de una infraestructura de hidrógeno que conecte a los compradores industriales con los productores”, y a este respecto señala que las refinerías y plantas de fertilizantes son ya grandes consumidores de hidrógeno, aunque producido a partir de gas natural. Reemplazarlo por hidrógeno verde requeriría electrolizadores de gran escala, y de ahí que se subraye la necesidad de que la infraestructura necesaria para la utilización de este gas esté disponible para los compradores industriales. Esto permitirá, por un lado, la producción de hidrógeno en lugares donde las energías renovables abundan y es más barato producirlas; y, por otro, un mercado más líquido y competitivo que ofrezca precios más bajos a los productores y consumidores.

Las 9 propuestas de Draghi para el gas natural

1. Establecer asociaciones con socios comerciales fiables y diversificados, reforzando también los contratos a largo plazo.
2. Fomentar un alejamiento progresivo del aprovisionamiento al contado (spot).
3. Reforzar la contratación conjunta.
4. Seguir desarrollando infraestructuras estratégicas de importación selectivas y mejorar la coordinación de la gestión del almacenamiento en toda Europa.
5. Mejorar la calidad de los datos y las previsiones.
6. Limitar la posibilidad de comportamientos especulativos: límites a la posición financiera, topes dinámicos, un reglamento de comercio de la UE y la obligación de comerciar en la UE.
7. Descarbonizar progresivamente la industria pasando al H2 y a los gases verdes cuando sea rentable.
8. Garantizar que los mecanismos de formación de precios del gas natural reflejen mejor los costes de las distintas condiciones de abastecimiento.
9. Facilitar a las industrias expuestas a la competencia internacional el acceso a fuentes de energía competitivas.