Enagás Renovable y Naturgy presentan en La Robla la futura planta de hidrógeno renovable con una capacidad de hasta 280 MW

Enagás Renovable y Naturgy han presentado en La Robla el proyecto para la construcción de una planta de hidrógeno renovable cuya capacidad de producción alcanzará hasta 280 MW.

Esta nueva planta, con puesta en marcha prevista en 2026 y una inversión estimada de 485 millones de euros, se ubicará en los terrenos de la antigua central térmica de Naturgy, cuyo cierre definitivo fue autorizado en 2020 y que actualmente se encuentra en proceso de desmantelamiento. Enagás Renovable y Naturgy han puesto en marcha la sociedad conjunta Robla Hub para llevar a cabo el proyecto.

El desarrollo de esta planta de producción de hidrógeno renovable llevará asociada la puesta en marcha de un proyecto de generación solar fotovoltaica compuesto por diversos parques situados en municipios aledaños, y cuya capacidad total ronda los 450 MWp.

Si bien en un inicio la capacidad máxima de la planta de producción de hidrógeno renovable era de 60 MW, la existencia de potenciales consumidores industriales en la zona y la cercanía a la futura red troncal de hidrogenoductos permitirá incrementar la potencia de electrolisis hasta 280 MW.

El nuevo dimensionamiento de esta instalación conseguirá alcanzar economías de escala, reduciendo los costes de producción del hidrógeno renovable y aumentando así las ventajas competitivas de las empresas consumidoras. Además, el proyecto opta a las distintas convocatorias de ayudas habilitadas a nivel nacional y europeo para el desarrollo del hidrógeno renovable.

Descarbonización e impulso al desarrollo local y regional

La planta de producción de hidrógeno renovable de La Robla permitirá evitar la emisión a la atmósfera de más de 430.000 toneladas anuales de CO2, contribuyendo a la descarbonización de los procesos industriales y al desarrollo de la movilidad sostenible.

El proyecto también busca ser un vector de desarrollo local, apoyando la descarbonización de actividades de la zona, para lo que se cuenta con una serie de potenciales consumidores en la industria, como la fábrica que Cementos Tudela Veguín tiene en La Robla. Asimismo, se prevén actuaciones de movilidad sostenible en la Comunidad Autónoma, como las impulsadas por la compañía Alsa para las líneas interurbanas en la provincia.

Este proyecto renovable está alineado con los objetivos de descarbonización de la Unión Europea, de la hoja de ruta del hidrógeno renovable de España de la Estrategia de Transición Justa, y del reciente Plan RePowerEU para favorecer la independencia energética en la Unión Europea.

El desarrollo de este proyecto refuerza el compromiso de Enagás Renovable y Naturgy con la transición energética y con las regiones mineras en el marco de la transición justa tras el cese de actividades como la minería y las centrales térmicas de carbón.

El objetivo principal actual del proyecto es minimizar el impacto económico y social de la transición en la zona y contribuir al desarrollo de una economía verde y baja en carbono. La planta de producción de hidrógeno renovable de La Robla supondrá así un importante impulso para el empleo y el desarrollo social y económico local y regional. Además de los empleos que generará en la región, la planta conllevará un impacto social muy positivo que favorecerá la repoblación de la zona y elevará la recaudación local por el efecto impositivo.

Hidrógeno renovable, el nuevo aliado para la descarbonización

El hidrógeno renovable se consigue principalmente mediante electrólisis, que consiste en la separación del hidrógeno del oxígeno que hay en el agua a través de electricidad renovable. Lo más determinante es que este proceso se alimenta en su totalidad por energía renovable, por lo que no genera ningún tipo de emisión contaminante a la atmósfera y es el hidrógeno más limpio y sostenible.

El hidrógeno renovable constituye una solución sostenible clave para la descarbonización de la economía, y es parte de la solución para lograr la neutralidad climática en 2050 fijada en el Pacto Verde europeo.

El hidrógeno renovable está llamado a ser un valioso vector energético para usos finales donde sea la solución más eficiente en el proceso de su descarbonización, como la industria intensiva en hidrógeno y procesos de alta temperatura, transporte pesado de larga distancia, transporte marítimo, transporte ferroviario o aviación. Además, su cualidad de vector energético le otorga gran potencial como instrumento para el almacenamiento energético y la integración sectorial.