El gas natural es un combustible limpio, eficiente y seguro. Sedigas recomienda hacer un buen uso y un mantenimiento correcto de las instalaciones y los aparatos de gas, y recuerda que el titular de la instalación o, en su defecto, el usuario, son los responsables de su buen funcionamiento.

El control de las instalaciones debe cumplir con un doble objetivo: ser garantía de seguridad y de eficiencia energética. No sólo porque es necesario para garantizar la seguridad de las personas, sino porque también ayudará a conseguir unos estándares de eficiencia energética altos, con más aprovechamiento de la energía y menos coste económico, prolongando la vida útil de sus aparatos.

En el submenú se detallan una serie de consejos para el consumo doméstico de gas natural canalizado y la seguridad en sus instalaciones domésticas partiendo de unos criterios de seguridad y eficiencia.