Este año la celebración de la COP26 ha sido aplazada a noviembre de 2021, las razones son conocidas por todos y mientras estemos sumidos en dar respuesta eficaz a la crisis sanitaria, social y económica puede parecer que desviar esfuerzos y recursos a detener o mitigar el cambio climático es algo fuera de lugar.
El desajuste del planeta nos pasa factura en forma de desastres naturales cada vez más frecuentes, el deshielo genera emisiones no controladas de metano y libera bacterias desconocidas hasta ahora y la seguridad alimentaria está en riesgo al no poder garantizar la producción de alimentos por los eventos climáticos ahora más adversos.
Aún estamos a tiempo. Investigar es fundamental, en términos de salud y también de energía. Investigar en energía redunda en la salud, porque reducir o eliminar las emisiones de CO2 crea entornos más saludables, un aire más limpio.
Descarbonizar es el objetivo, el reto es hacerlo sin comprometer el bienestar de las personas, sin reducir el nivel de confort conseguido como uno de los grandes logros de la humanidad.
Investigar para producir, transportar, distribuir y consumir gases descarbonizados: hidrógeno verde, biometano... para capturar, confinar y usar el carbono (CCSU) para generar puestos de trabajo de calidad, apoyar la economía circular y trabajar por una sociedad más respetuosa con las personas y el planeta. Juntos por el equilibrio. #PlanEspañaPuede
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Marta Margarit Secretaria General de Sedigas
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